¿Por qué la elección de esa propuesta de solución?
Ya teniendo establecido nuestro objetivo, o sea, ayudar a las personas que no tienen hogar, ni trabajo y viven durmiendo en la banca de alguna plazuela, hay que pensar: si yo fuera esa persona, ¿qué es lo que más me gustaría tener?
Bien, aquí una respuesta. Estas personas desearían tener al menos un trozo de pan o una cobija para sobrellevar las noches frías de la ciudad.
Es por eso que hemos elegido hacer una recolección de víveres y donación de prendas o artículos que puedan ser de gran utilidad hacia estas personas. Donando algunos "trapos" que nosotros o algún familiar nuestro ya no use, un paquete de agua nada costoso de algún supermercado, formar cajas de despensa para repartir, podría alegrarles la vida a quienes necesitan más que nosotros.
A veces no hace falta pasar por esas situaciones para darse cuenta de las necesidades que escasean los vagabundos. Por lo tanto, un apoyo con lo mínimo que se pueda o con lo que se crea que se puede ayudar, se puede hacer una gran diferencia si cooperamos todos.
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